Los Caribes, Cuba —
El destructivo Huracán Irma raspó la costa norteña el viernes pasado en una trayectoria hasta Florida, dejando una línea de islas resortes Caribeñas devastados, llenos de madera astillada, metal corrugado, y cemento quebrado.

El número de víctimas es medido a ser 22 y es esperado que subirá cuando rescatadores lleguen a los áreas con el golpe más duro.

Y un nuevo peligro viene del horizonte del este: Huracán José, un tormenta categoría 4 con 150mph que castigará los áreas devastados otra vez este fin de semana.

Irma bajó de la Categoría 5 a una Categoría 4 viernes por la mañana con vientos de 155 mph (kph)

El huracán aplastó casas, escuelas, tiendas, calles, y barcos el miércoles y jueves cuando rodaron las islas conocido por largo tiempo como los parques de agua turquesas de los ricos, incluyendo San Martin, San Barts, San Thomas, Barbuda y Anguilla.

El huracán eliminó servicios de agua, electricidad, y teléfono, atrapando miles de turistas y despojó los árboles lozanos verdes de sus hojas, dejando un misterioso, maldito-mirando paisaje. Autoridades reportan saqueos y disparos en San Martín, y un toque de queda fue impuesto en los Virgen Islas de los E.E.U.U.

Esta crisis es una mirada de lo que está por delante temprano en domingo para Florida, quienes son amenazados por lo que muchos temen que es el más grande, con la área metropolitana de Miami con 6 millones en sus vistas.

Irma fue hasta cierto punto la tormenta registrada más poderosa en el Atlántico abierto. Podría ser una de las tormentas más destructivas de la historia de Florida, un estado que ha experimentado un desarrollo rápido desde el último gran huracán que se produjo hace unos doce años.

Comienzan los esfuerzos de socorro para las zonas destruidas por el huracán Irma

Los residentes y los turistas de la Florida se enfrentaron a la escasez de gas y la paralización de la red, mientras medio millón de personas en el condado de Miami recibieron órdenes de liquidación.
El viernes en la mañana, Irma pasó frente a la República Dominicana y Haití y golpeó a las Islas Turcas y Caicos con olas de hasta 20 pies (6 metros). La comunicación disminuyó cuando la tormenta se estrelló contra las islas, y la extensión de la destrucción no fue inmediatamente clara.

El huracán también giró a lo largo de la costa norte de Cuba, donde miles de personas fueron trasladadas a lugares seguros, incluyendo a miles de turistas a lo largo de una costa salpicada de resorts con todo incluido.

Las autoridades estadounidenses, holandesas, francesas y británicas utilizaron buques de guerra y aviones militares para enviar alimentos, agua y tropas a la zona afectada.

En la isla de St. Thomas, parte de las Islas Vírgenes de los Estados Unidos, el hospital fue destruido, las líneas eléctricas y las torres fueron derribadas, una planta de tratamiento de agua y alcantarillado fue dañada y el puerto estaba en ruinas, junto con cientos de hogares y decenas de empresas.

Miles de turistas quedaron atrapados en San Martín, San Bartolomé y las Islas Vírgenes en el camino de José, que amenazó con atacar temprano el sábado. Las autoridades se apresuraron a evacuar todas las personas como fuera posible de Barbuda antes de la nueva tormenta.

En San Martín, que se divide entre el control holandés y francés, los cafés y las tiendas se inundaron, y la tormenta dejó ramas negras y retorcidas, despojadas de hojas. Coches maltratados, metal corrugado, madera contrachapada, hierro forjado y otros escombros cubiertos calle tras calle. Los techos fueron arrancados de numerosas casas.

La limpieza ya estaba en marcha para algunos. Un hombre cortó las ramas de un árbol descubierto. Otro lanzó lo que parecía ser muebles rellenos en un montón. La gente se sentaba en las sillas afuera de un hospital, esperando a que los vieran.

Los muertos incluyeron 11 en St. Martín y San Bartolomé, cuatro en las Islas Vírgenes de los Estados Unidos, cuatro en las Islas Vírgenes Británicas, dos en Barbuda y uno en Anguilla.

Una de las muertes en Barbuda fue la de un surfista profesional junior de 16 años que se ahogó el martes mientras navegaba en oleadas grandes generadas por Irma, la cual se acercaba.