Origen del Día de los Muertos

¿De dónde viene la tradición del Día de los Muertos?

 

Hoy en día, pensamos que el Día de los Muertos es una celebración mexicana, pero los orígenes de ésta tradición datan desde hace milenios–mucho antes de que México fuera un país. Para estudiar la historia del Día de los Muertos, tenemos que devolvernos 4000 años atrás.

Antes de la invasión española, muchas culturas indígenas se levantaron y cayeron en el territorio ahora conocido como México: los Olmecas, los Mayas y los Aztecas fueron tan sólo unas de estas civilizaciones Mesoamericanas que florecieron por casi cuarenta siglos. Aunque todas las tribus fueron distintas, todas mostraban un rasgo similar: la creencia en la vida eterna. Cuando la gente moría, ellos no terminaban de vivir–en vez, sus almas partían al “más allá”.

Esta convicción del ciclo de la vida resultó en la celebración de la muerte, en lugar de tener miedo a ella. La muerte era simplemente la continuación de la vida, sólo que en otro plano de existencia.

Una vez al año, los Aztecas tenían un festival celebrando la muerte de sus ancestros, en el que honoraban a la diosa Mictecacihuatl, la Reina del Inframundo, o La Catrina. Los Aztecas creían que los difuntos preferían ser celebrados en vez de ser lamentados, así que, durante el festival, primero los Aztecas honoraban a los angelitos y luego a los difuntos adultos.

El festival de Mictecacihuatl duró por un mes entero, empezando desde el fin de Julio hasta mediados de Agosto (el noveno mes en el calendario Azteca), durante la temporada de cosechas de maíz.

Después de que los españoles conquistaran a los Aztecas en 1521, ellos trataron de adoptar sus creencias Católicas a los Aztecas, debido a que no comprendían el sistema Azteca de convicciones y no les importaba hacerlo.

Como Católicos, ellos pensaban que los Aztecas eran simples bárbaros paganos e intentaron de aplastar los viejos rituales Aztecas y convertir a la gente indígena al Catolicismo por completo. Sin embargo, los conquistadores fallaron. Como resultado, lo que lograron fue más que todo un compromiso; una mezcla de creencias.

Afortunadamente para los conquistadores españoles, pudieron disminuir el largo término del festival de Mictecacihuatl a tan sólo dos días que, convenientemente, corresponden con dos de sus celebraciones Católicas: El Día de Todos los Santos y el Día de Todas las Almas (primero y segundo de noviembre respectivamente). Este cambio fue un punto clave en la historia del Día de los Muertos.

Los españoles convencieron a los indígenas a atender misas especiales en esos dos días y así, conmemorar a los difuntos para cambiar la historia y el significado original del Día de los Muertos y que encajara con sus propósitos Católicos. Sin embargo, las tradiciones nativas prevalecieron.

Por varios siglos, estas tradiciones se transformaron en el Día de los Muertos del presente.

Hoy en día, el Día de los Muertos continúa evolucionando. Con la mayoría de Mexicanos migrando a otros países, como los Estados Unidos y Canadá, muchas otras comunidades han adoptado el Día de los Muertos. Además, gracias al Internet, muchas otras personas han podido celebrar el Día de los Muertos a su manera y gusto.