Washington (CNN)

https://www.cnn.com/2018/01/08/politics/temporary-protected-status-el-salvador/index.html

La administración de Trump va a poner un fin al estatus de Protección Temporal (TPS) para ciertos inmigrantes de El Salvador, un cambio que puede dejar a más de 200,000 inmigrantes que han vivido en los Estados Unidos por más de 15 años sin ningún estatus legal, lo anunció el departamento seguridad nacional el Lunes pasado.El vencimiento va a llegar dentro de 18 meses, igual como la administración lo hizo con recientemente terminó el estatus de protección con el estatus de protección de otros países.

El retraso quiere decir que más de 250,000 gente debajo del TPS tienen hasta 9 de Septiembre de 2019 para encontrar otra manera de quedarse en los Estados Unidos o prepararse para irse. El avance grandísimo culmina una series de decisiones parecidas de la administración de Trump para esencialmente para reducir el uso del del estatus protegido (TPS)– una protección de deportación y la autorización de vivir y trabajar legalmente para las personas que han sufrido desastres como guerras, epidemias, o desastres naturales.El DHS dice que más de 250,000 Salvadoreños– todos los que han vivido en los Estados Unidos desde 2001– son protegidos por TPS.

Parte de una tendencia más fuerte de la administración.La administración ha presionado para restringir fuertemente el uso de TPS, una protección prevista por la ley, diciendo que las extensiones repetidas de las protecciones típicamente de dos años por administraciones anteriores de ambas partes han terminado el estado “temporal” de la protección.DHS ha hecho un esfuerzo para enfatizar que TPS depende de la razón original para la designación, no de las condiciones actuales. En el caso de El Salvador, esa fue una serie devastadora de terremotos antes de su designación en 2001. 

En una llamada con reporteros, un alto funcionario del gobierno dijo que la secretaria (Kirstjen Nielsen) decidió que la terminación era “necesaria” dado que el desastre original que precipitó de protección se resolvió lo suficiente como para terminar con las protecciones. Los funcionarios de la convocatoria rechazaron reiteradamente las preguntas sobre la violencia y las condiciones económicas que persisten en El Salvador, incluida la pandilla MS-13, que ha sido un objetivo principal de esta administración, diciendo que esos factores son irrelevantes para la decisión.Los críticos inmediatamente juzgaron la decisión.“Se han reasentado, han establecido sus familias y vidas aquí en los Estados Unidos. La mayoría de ellos se ven a sí mismos mucho más como ciudadanos estadounidenses que ciudadanos salvadoreños y para terminar con la protección y el programa que van a afectar a muchas comunidades en los Estados Unidos”, Rep.Gerry Connolly, demócrata de Virginia, dijo en CNN el lunes. “es inhumano y no á en acuerdo con los valores americanos.”

La crítica no se limitó a los demócratas. Mario Diaz- Balart el Republicano de Florida y el defensor de la reforma migratoria, rápidamente lanzó una declaración en “fuerte desacuerdo” con la administración.“Estas personas inocentes huyeron de su país de origen después de un desastroso terremoto, y aunque las condiciones de vida pudieron haber mejorado ligeramente, el Salvador enfrenta ahora un problema importante con el narcotráfico, las pandillas y el crimen”, dijo Díaz-Balart. “Desde 2001, estas personas se han establecido en los Estados Unidos, haciendo innumerables contribuciones a nuestra sociedad y nuestras comunidades locales. Sería devastador enviarlos a casa después de haber creado una vida humilde para ellos y su familias”El tema será ahora trasladado al Congreso. Los negociadores del Senado están discutiendo quizás incluir un acuerdo para poner fin a la lotería de visas de diversidad, que es un objetivo principal del Presidente Donald Trump, a cambio de alguna resolución sobre el TPS, según el senador republicano de Arizona Jeff Flake.“Podemos lidiar con la visa de diversidad, si la emparejamos con TPS, haciendo algún tipo de visas de reasignación allí”, dijo Flake a los reporteros el viernes.